16 de agosto de 2009

Monstruos verdaderos

Me encontraba caminando tranquilamente con mi hijo cuando, en forma repentina, me detuvo para hacerme un pregunta:
- "Papito... ¿sabías que los bomberos no existen?".
- "¿Cómo es eso?... ¡sí existen!".
- "Nooo, los bomberos no existen".
- "Campeón, los bomberos existen, es más, tú también los has visto".
- "¡Nooo!, no existen esos, los bamberos".
- "¿Los bamberos?".
- "¡No!, los bamberos, los bambiros... ¡esos poh'!, los que te chupan la sangre".

Preferí permanecer en silencio, a pesar que Nicolás estaba equivocado, ya que por suerte todavía no conocía a mis compañeros de trabajo.

5 comentarios:

lopillas dijo...

Jajaja qué lindo!! Son los mejores y más divertidos filósofos, sin duda.
Los bambiros inmunes al ajo son los peores, pero hiciste bien en no decírselo, que ya tendrá tiempo de tener pesadillas con el jefe...
A los compañeros, Juan, un buen estacazo como se pasen jeje.
Un beso grande

Cathy Brown dijo...

Ahhhh,que divino!!!!!!!Saludos

Live For Words dijo...

Los bamberos!! jajajajaja buen juego de palabras Juan :D y una simpática historia a partir de ello, la interpretación final viene por añadidura jajaja. Saludos, y no te has portado mal, yo me porto peor u.u

:D

Simply, Cari.- dijo...

Super tierno!!!

Me acordé de mi Nicolás cuando era más chiquito...

Dantilandia dijo...

Bakan...ese es como el chiste de pluto...o puto
Ja Ja Ja